Chile en Brasil 2014. Sueño de Héroes.
Posted: 6/29/2014 by Unknown in
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Cuesta describir la sensación que
queda en el aire tras nuestro paso por el Mundial de Fútbol Brasil 2014. Porque
es incomparable, aunque al final, el resultado sea el mismo. Hay algo de
desgano, de incredulidad, de duelo, de orgullo absoluto, y de rabia
inconsolable. Estuvimos tan cerca, y quedamos tan lejos, que el silencio que
queda en el ambiente tras el último penal, se vive como injusto, como
inaceptable, como parte de un mundo que no nos corresponde vivir.
Seamos sinceros. Vivimos este
mundial con incredulidad. Más de la mitad de Chile no daba un peso frente nuestra
participación. La publicidad de una selección triunfadora, llegaba a sonar hasta
cómica. Pasar la fase de grupos era ya heroico. España y Holanda eran monstruos
que ni siquiera prestarían atención a nuestra presencia. A pesar de que sabíamos
que el nuestro era un excelente equipo; nuestra férrea convicción ante la
derrota, siempre es y ha sido más fuerte. Somos chilenos, son deportistas chilenos, y estábamos
condenados, por karma, a un destino nefasto.
Pero vimos a estos chiquillos
creer; vimos a estos chiquillos plantarse con tal gallardía que nos remecieron
en lo más profundo. Vimos a este grupo de compatriotas convertirse en guerreros
que pasaron de generar vagos comentarios a provocar pavor en el contrario. Australia
fue un trámite, pero cuando cayó España, el mundo nos presto atención. Holanda fue
una voz de alarma. Hasta que llegamos inevitablemente a encontramos con Brasil…
ese maldito Brasil burlón, rebosante de éxito y seguridad… ese dueño de casa
que nos miraba con una sonrisa en la boca, ebrio en su incuestionable
superioridad histórica.
Últimos minutos del alargue ante
Brasil. Y siento estar viviendo un sueño. Lo único que se me viene a la mente
es la imagen de ese estadio imponente y completamente atónito; de un Gary Medel
épico; de un Bravo invulnerable; de un Charles Aránguiz imponente; de un Alexis Sanchez incansable; y de ese palo de Pinilla que detuvo el tiempo, que lo iluminó todo,
que reinició nuestro destino borrando los cimientos de nuestra historia
deportiva. Recuerdo haber sentido la convicción de que con eso ya era
suficiente… lo demás era una simple anécdota. Chile había emergido desde la pestilente
y profunda nebulosa de la inexistencia, a brillar ante los ojos aterrados de
millones de brasileños.
Agotado, tendido sobre la
alfombra, sólo me limité a escuchar la agonía de la definición a penales… hasta
que las trompetas de la derrota descendieron arrogantes y destempladas, hundiéndonos
en un silencio amargo. Era el fin, los amarillos celebraban entre lágrimas,
agotados, desesperados, heridos… mientras nosotros simplemente masticábamos una
derrota que nos costó sangre, sudor y sueños.
Jamás olvidaré de este partido. Aún
me cuesta encontrarle sentido o moraleja a lo sucedido: ¿suerte?, ¿destino?, ¿injusticia?...
no se... para mi es el partido más épico, perfecto, potente que he vivido de
una selección chilena. Con el corazón rebosante de orgullo, me llamó mi hermano
y yo sólo atinaba a repetir... "esto es increíble"... estaba emocionado a morir, paralizado, no me importaba el que hubiéramos
perdido, estaba impactado por lo que había visto. Y prefiero quedarme con esa
sensación, detener el tiempo ahí y atesorarla como un regalo hermoso, el que debemos agradecer,
reconocer y cuidar.
Chile en este mundial demostró lo que es ser chileno: la gallardía, el esfuerzo, el amor propio, el sacrificio hasta desangrarse por un objetivo, la permanente lucha ante la adversidad. Esta Selección prometió un sueño y cumplieron haciéndonos soñar. Y lo más importante, nos demostró que lo que necesitamos no son copas... sino que héroes, y definitivamente, los hemos conseguido.
GRANDE LA SELECCIÓN CHILENA.